11 Dic 08. Capricieux Grute.

Me pongo al día. Si esto al final es gratificante y todo.


La cena.


El menu es tan sencillo, sabroso y pantagruélico que no se si será creíble. En la mesa nos sentábamos Petróleos, Silos y Cajil. Al final Cajil casi no se levanta. Salimos remando.


Ensalada de salmón. Abundante lechuga bien acompañado del anádromo bermellón.


Steak Tartare.


Chuletón de buey.


T-bone.


.. y pan.


Añares doble ración. Discretos en los acuarios.


Manzanillas. De las que echan flores.


47€ con vino. Volvemos a las andadas. O a las remadas.


Los tópicos.


¿Se puede comer mas?
¿Estará bueno el steak tartare de pescado?
Vamos que encima estuvimos hablando de papeo.
La gente que mete la mano en la lata del gofio no es tan infrecuente al fin y al cabo.




El después.


Silos, nos deja cual esputo verde. Se va. En el asiduo local, con puerta, nos reciben como siempre. Petróleos y Cajil entran pero no como siempre. Al menos Cajil parecía remar en galeras. Casi se nos duerme. Y después pateito rejuvenecedor.


Y tal.